He vivido más en estos tres últimos
meses que en unos pocos años... He cambiado de vida en el último mes de forma
desenfrenada.
Pero hoy tengo un hueco, unas
ganas y una ilusión. Como siempre voy a dejar que las palabras fluyan sin más...
Tenía desde hace un tiempo el
presentimiento de que todo iba a cambiar. Cada vez aprobaba más convocatorias
de exámenes de la administración local y me situaba cada vez más cerca.
En diciembre ya rechacé una. Era
para la Diputación de Jaén y me pillaba muy lejos. Me costó rechazar pero es
que era imposible venir a Sevilla todos los fines de semana a dar clase. Ya
saben, la carretera pesa y mucho.
Pero a finales de enero una
llamada cambia toda mi cotidianidad.
Ayuntamiento de Aznalcázar,
interinidad de cuatro meses para activación de la Renta Mínima de Inserción.
ACEPTÉ. Además sin dudarlo.
Pero lo mejor de todo es que en
dos semanas recibo otra llamada.
Ayuntamiento de Málaga,
interinidad, refuerzo de los Servicios Sociales Comunitarios.
ACEPTÉ. Además sin dudarlo.
Y así es como uno piensa que la
vida cambia en cuestión de segundos y que además empieza hoy mismo.
Como comprenderéis estoy hasta
arriba preparando y organizando todo.
Pero, ¿Qué ha pasado con Centro
Atrade? No ha pasado nada, el Centro sigue su funcionamiento ya sin mí.
Como quiero que esta publicación sea
al menos algo útil, quiero enumerar las cosas que he aprendido en mí caminar
como emprendedora:
1. La paciencia es la virtud
mayor del emprendedor/a. Si montas un negocio para que rápidamente llegue el
dinero estás más que equivocado. Los negocios dan sus frutos pasados unos años.
Sí, he dicho años.
2. Debes controlar las emociones.
Si no eres paciente, si te agobia que no vaya a salir bien, o no confías, si no
te llevas bien con tu socio o crees que tú haces más cosas o con mayor
responsabilidad debes de controlar bien todas esas emociones y pensamientos.
3. Redes Sociales, tu gran apoyo.
Si no eres muy habilidoso en redes sociales contrata a alguien que lo sea. Será
el dinero mejor invertido del mundo.
4. No pienses mucho las cosas. Si
te lías la cabeza pensando si saldrá o no bien es muy probable que te entre
miedo y no lo haga. Como en el musical
de La Llamada: “Lo hacemos y ya vemos”.
5. No te involucres tanto en el
negocio llegándote a olvidar de ocio, familia, amigos o pareja. Ponte un
horario fijo de trabajo.
6. Conoce y habla a otros
empresarios que no tengan nada que ver con tu negocio, así aprenderás mucho.
7. Intenta ahorrar siempre. Márcate
un sueldo, pero piensa que si vienen las vacas flacas debes tener liquidez.
8. Celebra cada éxito que tengas,
aprende de cada fracaso.
Aunque no fuera mi camino estoy
muy orgullosa de todo lo que he creado en Centro Atrade y de cómo está hasta
donde estuve.
Me voy a despedir aquí no sin
antes deciros y recordaros que siempre apoyaré a todo aquel que crea que su
camino está en el emprendimiento.
Un abrazo!